Con un poquito de retraso os escribimos acerca del día internacional del Tripulante de Cabina de Pasajeros, que celebramos el 31 de mayo desde 2015.
Nuestro día internacional está dedicado a reconocer nuestro trabajo, nuestra dedicación y nuestra profesionalidad. Dedicado a aquellos auxiliares de vuelo que madrugan mucho, se acuestan tarde o trabajan largas horas durante el día para asegurar al pasajero que tenga un vuelo seguro y también brindarle confort y una experiencia de vuelo lo más agradable posible.
Las primeras TCP en la aviación comercial se dedicaban exclusivamente a labores comerciales y de atención al pasaje, aunque la primera mujer TCP fue Ellen Church y fue contratada gracias a que era enfermera titulada.
Debemos apuntar que el primer auxiliar de vuelo como tal fue Heinrich Kubis, un hombre alemán, que trabajó en un Zeppelin alemán. Y aunque ahora esta profesión este mayoritariamente dominada por mujeres, fueron hombres los primeros en ser contratados como «chicos de cabina», allá por los años 1920, por compañías americanas como Western Airlines o Pan Am.
Poco a poco las responsabilidades de los TCP iban en aumento, convirtiendo la seguridad de la aeronave y la seguridad de los pasajeros en una tarea vital y prioritaria.
Gracias a eso, hoy en día sabemos que un TCP es indispensable en el día a día de un avión. Ha sido gracias al trabajo y esfuerzo de muchos auxiliares que han dedicado su carrera profesional a enseñarnos realmente la importancia de esta trabajo.
¿Te has preguntado alguna vez qué es lo primero que ve un pasajero cuando entra al avión? A nosotros! Recuerda, somos la imagen de la compañía, esa primera impresión que el pasajero se lleva de la compañía eres tú, futuro TCP. Sonríe, sí, pero al mismo tiempo esta